Conéctate con nosotros

Cocina

Como se hace el chocolate blanco: receta original y guía para hacerlo en casa

Artículo publicado

el

Como se hace el chocolate blanco

En este artículo, descubriremos cómo se hace el chocolate blanco. Aprenderemos su origen, quién lo inventó, sus características y peculiaridades, sus diferencias con el chocolate normal (o negro), los ingredientes que lo componen, y sus ventajas y desventajas para el organismo humano.

Además, ofreceremos una guía paso a paso con ingredientes, materiales, tiempos de preparación, herramientas y utensilios para hacer el chocolate blanco en casa, con ideas, consejos, recomendaciones y errores a evitar, para que todos puedan hacer su propio chocolate blanco en casa lleno de sabor. También daremos alternativas para quien no puede tomar azúcar o quien no puede comer gluten.

¿Qué es el chocolate blanco y cuál es su origen?

El chocolate blanco es un tipo de chocolate que se elabora a partir de la manteca de cacao, azúcar y leche en polvo. A diferencia del chocolate negro, no contiene pasta de cacao.

Su origen se remonta a los años 30 en Europa, cuando los fabricantes de chocolate buscaban una alternativa al chocolate tradicional, que había escaseado debido a la Segunda Guerra Mundial. Nestlé fue la primera compañía en lanzar el chocolate blanco al mercado en 1936, bajo el nombre de «Galak».

Características y peculiaridades del chocolate blanco

Algunas de las características y peculiaridades del chocolate blanco son su color claro, que varía entre un tono marfil y un amarillo pálido; su sabor dulce y suave, con notas lácteas y de vainilla; y su textura cremosa y fundente.

Aunque es rico en grasas y azúcares, carece de antioxidantes y nutrientes presentes en el chocolate negro, como los flavonoides y el magnesio.

Diferencias entre el chocolate blanco y el chocolate negro

La principal diferencia entre el chocolate blanco y el chocolate negro es su composición. Mientras que el chocolate negro contiene pasta de cacao, que le aporta su color oscuro y su sabor amargo, el chocolate blanco no la incluye en su receta.

Además, el chocolate blanco suele contener más azúcar y grasas que el chocolate negro, lo que lo hace más calórico y menos saludable. Sin embargo, también es cierto que el chocolate blanco no contiene cafeína ni teobromina, lo que lo hace más adecuado para personas sensibles a estos estimulantes.

Por otro lado, el chocolate negro es más rico en antioxidantes y nutrientes que el chocolate blanco, gracias a la presencia de la pasta de cacao.

Cómo se hace el chocolate blanco: la receta original

El chocolate blanco, a diferencia de sus contrapartes más oscuros, no contiene sólidos de cacao, y en cambio se basa en la manteca de cacao, azúcar y leche.

Según la receta antigua, estos tres ingredientes se mezclan cuidadosamente, calentándolos hasta que se funden y forman una masa uniforme, que luego se enfría y se moldea.

Aunque este proceso sigue siendo la base para la creación del chocolate blanco, las variaciones modernas han introducido una amplia gama de sabores y técnicas adicionales. Ahora, es común encontrar chocolate blanco con vainilla, nueces, frutas y otros sabores.

Además, técnicas de producción innovadoras, como el conchado – proceso de trituración y calentamiento para mejorar la textura y el sabor – y el templado – calentamiento y enfriamiento controlado para mejorar el brillo y la textura – han permitido a los chocolateros perfeccionar la textura y el sabor de este dulce tan apreciado.

Guía para hacer chocolate blanco en casa

Hacer chocolate blanco en casa es más fácil de lo que parece. A continuación, te ofrecemos una guía paso a paso para que puedas elaborar tu propio chocolate blanco lleno de sabor:

Ingredientes: 200g de manteca de cacao, 100g de azúcar glas, 100g de leche en polvo, 1 cucharadita de vainilla en polvo y una pizca de sal.

Materiales y utensilios: un cazo, un bol, un termómetro de cocina, moldes para chocolate y una espátula de silicona.

Tiempo de preparación: aproximadamente 1 hora, más el tiempo de enfriamiento.

Paso 1: Funde la manteca de cacao en un cazo a fuego muy bajo, removiendo constantemente para evitar que se queme. Cuando esté completamente derretida, retira el cazo del fuego.

Paso 2: Tamiza el azúcar glas y la leche en polvo en un bol, y luego incorpora la vainilla y la sal. Mezcla bien los ingredientes secos.

Paso 3: Añade la manteca de cacao derretida a los ingredientes secos y mezcla bien con la espátula de silicona hasta obtener una mezcla homogénea.

Paso 4: Vierte la mezcla en los moldes para chocolate y golpéalos suavemente sobre la encimera para eliminar las burbujas de aire. Deja enfriar el chocolate a temperatura ambiente durante unos minutos y, a continuación, introdúcelo en la nevera hasta que esté completamente sólido.

Paso 5: Desmolda el chocolate con cuidado y disfruta de tu delicioso chocolate blanco casero.

Ideas, consejos y errores a evitar

Aquí tienes algunas ideas, consejos, recomendaciones y errores a evitar para obtener un chocolate blanco casero de calidad:

Temperatura: Controla la temperatura de la manteca de cacao mientras se derrite, ya que un exceso de calor puede quemarla y afectar al sabor del chocolate. Utiliza un termómetro de cocina para asegurarte de que no supere los 45°C.

Ingredientes de calidad: Elige ingredientes de buena calidad para obtener un chocolate blanco casero con un sabor y textura óptimos.

Alternativas sin azúcar o sin gluten: Si no puedes tomar azúcar o gluten, puedes sustituir el azúcar glas por edulcorantes como la stevia o el eritritol, y utilizar leche en polvo sin lactosa o leche de almendras en polvo en lugar de la leche en polvo tradicional.

Añade sabor: Puedes personalizar tu chocolate blanco añadiendo frutos secos, frutas deshidratadas o especias como la canela o el cardamomo.

Conservación: Guarda tu chocolate blanco casero en un lugar fresco y seco, alejado de la luz solar y de olores fuertes, para que no se derrita ni absorba otros sabores.

Para los amantes del chocolate blanco

El chocolate blanco es un delicioso tipo de chocolate que puede ser disfrutado por aquellos que prefieren sabores más suaves y dulces.

Ahora que conoces su origen, sus características y peculiaridades, y cómo hacerlo en casa, estás listo para disfrutar de esta delicia en tus postres o como un capricho ocasional.

Recuerda consumirlo con moderación, ya que, a pesar de ser delicioso, su alto contenido en azúcares y grasas puede tener efectos negativos en la salud si se consume en exceso. ¡Disfruta de tu chocolate blanco casero!

Lo más leído