Conéctate con nosotros

Diversión

Porque las mujeres no tienen nuez: un paseo entre mito y ciencia

Artículo publicado

el

Porque las mujeres no tienen nuez

La nuez, también conocida como manzana de Adán, es una protuberancia situada en la parte frontal del cuello que es más prominente en los hombres que en las mujeres.

En este artículo, exploraremos las razones por las cuales las mujeres no tienen nuez, así como la función de esta glándula, las diferencias entre hombres y mujeres, y los significados culturales e históricos asociados a la nuez.

Función de la nuez

La nuez no es una glándula sino un cartílago que forma parte de la laringe, un órgano del sistema respiratorio que también juega un papel crucial en la producción de sonidos y la modulación de la voz.

La laringe contiene las cuerdas vocales, que son responsables de la producción de sonidos cuando el aire pasa a través de ellas.

La nuez, específicamente, es el cartílago tiroides, que se encuentra en la parte frontal de la laringe y protege las cuerdas vocales y otros órganos internos.

Diferencia entre hombres y mujeres

Estructura de la laringe

Aunque tanto hombres como mujeres tienen cartílago tiroides, la diferencia en la prominencia de la nuez se debe a las diferencias en la estructura de la laringe.

Durante la pubertad, las hormonas sexuales masculinas, como la testosterona, provocan un crecimiento más rápido y significativo del cartílago tiroides en los hombres.

Este crecimiento hace que el ángulo entre las dos placas del cartílago tiroides se vuelva más agudo en los hombres, lo que resulta en una nuez más prominente.

Tamaño de la laringe y la voz

Además de la diferencia en la prominencia de la nuez, la laringe también varía en tamaño entre hombres y mujeres. Los hombres suelen tener una laringe más grande, lo que resulta en cuerdas vocales más largas y gruesas.

Esto produce una voz más grave en comparación con las mujeres, cuya laringe es más pequeña y tiene cuerdas vocales más cortas y delgadas, lo que resulta en una voz más aguda.

Significados culturales e históricos

La manzana de Adán

La nuez también se conoce como la «manzana de Adán» debido a una historia bíblica. Según la tradición judeocristiana,

Adán, el primer hombre creado por Dios, comió una manzana del árbol del conocimiento del bien y el mal en el Jardín del Edén, a pesar de la prohibición divina.

Se cree que la manzana se atascó en su garganta y formó la protuberancia conocida como la nuez. Aunque esta historia es un mito religioso, ha dejado una marca cultural duradera en la percepción de la nuez como un rasgo masculino.

Roles de género y simbolismo

La presencia de la nuez en los hombres y su ausencia en las mujeres ha llevado a una serie de interpretaciones culturales y simbólicas a lo largo de la historia.

En algunas culturas, la nuez ha sido vista como un símbolo de virilidad, poder y fuerza, mientras que la ausencia de nuez en las mujeres ha sido asociada con delicadeza y feminidad.

Estas percepciones han influido en los roles de género y las expectativas sociales en diferentes épocas y culturas.

Implicaciones de la ausencia de nuez en las mujeres

La ausencia de una nuez prominente en las mujeres no tiene implicaciones negativas para la salud ni afecta la función de la laringe.

La principal diferencia entre hombres y mujeres en este aspecto es el tono de la voz. Las mujeres, en general, tienen voces más agudas debido al tamaño más pequeño de su laringe y a las cuerdas vocales más cortas y delgadas.

Esto no impide que las mujeres puedan hablar, cantar o realizar cualquier otra función relacionada con la producción de sonidos.

Desvelando un mito legendario

En resumen, las mujeres no tienen una nuez prominente debido a las diferencias en la estructura de la laringe, que es un resultado de la acción de las hormonas sexuales durante la pubertad.

La ausencia de nuez en las mujeres no afecta su capacidad para hablar o cantar y no tiene implicaciones negativas para la salud.

A lo largo de la historia, la presencia o ausencia de nuez ha influido en los roles de género y las expectativas culturales, pero es importante recordar que se trata de una característica física y no debe usarse para determinar el valor o las habilidades de una persona.

Lo más leído