Diferencia entre suelo laminado y tarima flotante: elige la mejor opción

Al elegir el tipo de suelo para una vivienda o espacio comercial, es común encontrarse con una amplia variedad de opciones, entre las cuales destacan el suelo laminado y la tarima flotante.

Ambos tipos de suelos tienen características que los hacen populares, pero también hay diferencias importantes que debes conocer antes de tomar una decisión.

En este artículo, te explicaremos las diferencias entre el suelo laminado y la tarima flotante, ofreciéndote información completa y detallada, consejos, recomendaciones, guía paso a paso, curiosidades y errores a evitar.

¿Qué es el suelo laminado?

El suelo laminado es un tipo de suelo compuesto por varias capas de materiales derivados de la madera, como el HDF (tablero de fibra de alta densidad) o el MDF (tablero de fibra de densidad media).

La capa superior es una lámina decorativa que imita diferentes tipos de acabados, como la madera, la piedra o el mármol, y está protegida por una capa de resina transparente y resistente al desgaste.

Este tipo de suelo se ha popularizado debido a su facilidad de instalación, durabilidad y precio asequible.

¿Qué es la tarima flotante?

La tarima flotante es un tipo de suelo de madera que se instala sin fijarse directamente al subsuelo, sino que «flota» sobre una capa aislante. Esta técnica de instalación permite que el suelo se adapte mejor a los cambios de temperatura y humedad, evitando deformaciones y daños.

La tarima flotante puede estar compuesta por madera maciza o por capas de madera contrachapada o aglomerado, con una capa superior de madera noble que le confiere el aspecto y la calidad de un suelo de madera tradicional.

La diferencia entre suelo laminado y tarima flotante

Composición y apariencia

Una de las principales diferencias entre el suelo laminado y la tarima flotante es su composición. Mientras que el suelo laminado está compuesto por materiales derivados de la madera y una lámina decorativa, la tarima flotante está fabricada con madera maciza o capas de madera contrachapada o aglomerado.

Aunque ambos tipos de suelos pueden ofrecer una apariencia similar a la madera natural, la tarima flotante cuenta con una capa superior de madera noble que le proporciona una mayor autenticidad y calidez, mientras que el suelo laminado imita el aspecto de la madera mediante una lámina decorativa.

Instalación

La instalación de ambos tipos de suelos es relativamente sencilla, pero existen algunas diferencias. El suelo laminado se instala mediante un sistema de clic que permite unir las piezas entre sí sin necesidad de adhesivos ni clavos, lo que facilita y acelera el proceso.

La tarima flotante también se instala sin fijarse al subsuelo, pero puede requerir el uso de adhesivos o grapas para unir las piezas entre sí, lo que puede resultar en un proceso más laborioso.

Durabilidad y resistencia

En términos de durabilidad y resistencia, la tarima flotante suele ser más resistente y duradera que el suelo laminado, debido a su composición de madera maciza o capas de madera contrachapada.

Sin embargo, el suelo laminado cuenta con una capa protectora de resina que lo hace resistente al desgaste, a los arañazos y a las manchas.

Ambos tipos de suelos son adecuados para áreas de tráfico moderado a alto, pero la tarima flotante puede tener una vida útil más larga si se mantiene adecuadamente.

Mantenimiento y reparación

El mantenimiento y la reparación de los suelos laminados y tarima flotante también presentan diferencias. El suelo laminado es fácil de limpiar y mantener, pero si se daña, puede ser difícil de reparar, ya que la capa decorativa no se puede lijar ni restaurar.

En cambio, la tarima flotante de madera maciza o multicapa puede ser lijada y restaurada varias veces a lo largo de su vida útil, lo que permite reparar arañazos y daños más fácilmente.

Precio

En general, el suelo laminado suele ser más económico que la tarima flotante, tanto en términos de precio por metro cuadrado como de costes de instalación.

Sin embargo, la tarima flotante puede ser una inversión a largo plazo, ya que su durabilidad y posibilidad de restauración la hacen más resistente al paso del tiempo.

Diferencia entre suelo laminado y tarima flotante: algunas curiosidades

Historia del suelo laminado: El suelo laminado fue inventado en 1977 por la empresa sueca Perstorp, que lo comercializó bajo la marca Pergo. Desde entonces, se ha convertido en una opción de suelo popular en todo el mundo debido a su apariencia versátil, facilidad de instalación y precio asequible.

Origen de la tarima flotante: La tarima flotante se originó en Europa en la década de 1980 como una solución a los problemas de expansión y contracción que experimentan los suelos de madera maciza. Su diseño único y la técnica de instalación flotante permiten que el suelo se adapte mejor a los cambios de humedad y temperatura, lo que reduce el riesgo de deformaciones y daños.

Variedad de acabados: Tanto el suelo laminado como la tarima flotante están disponibles en una amplia gama de acabados, desde la madera tradicional hasta la piedra, el mármol y el metal. Esto permite a los propietarios personalizar fácilmente el aspecto de sus suelos según sus preferencias y el estilo de su hogar.

Respeto al medio ambiente: Algunas tarimas flotantes cuentan con certificaciones ecológicas, como la FSC (Forest Stewardship Council), que garantiza que la madera proviene de bosques gestionados de manera sostenible. Por otro lado, algunos suelos laminados están fabricados con materiales reciclados, lo que contribuye a reducir el impacto ambiental.

Al elegir el suelo adecuado para tu hogar o espacio comercial, es importante tener en cuenta las diferencias entre el suelo laminado y la tarima flotante, así como sus ventajas y desventajas.

Esperamos que este artículo te haya ayudado a tomar una decisión informada y a seleccionar el tipo de suelo que mejor se adapte a tus necesidades y preferencias.

Conclusión

La elección entre el suelo laminado y la tarima flotante dependerá de tus necesidades, preferencias y presupuesto.

Si buscas una opción económica y fácil de instalar, el suelo laminado puede ser la mejor opción para ti.

Por otro lado, si prefieres un suelo de madera auténtica, duradera y que pueda ser restaurada a lo largo del tiempo, la tarima flotante podría ser la mejor elección.

Esperamos que este artículo te haya proporcionado información valiosa sobre las diferencias entre el suelo laminado y la tarima flotante, así como consejos, recomendaciones, guía paso a paso, curiosidades y errores a evitar al elegir entre estas dos opciones populares de suelos.