La guía completa e ideas para revestir un armario empotrado

Hoy vamos a explicarte, de manera rápida y sencilla, como revestir un armario empotrado y mejorar la decoración de tus habitaciones en casa.

El armario empotrado se ha convertido en un aliado esencial para el almacenamiento en muchos hogares, optimizando el espacio disponible y proporcionando soluciones de almacenaje adaptadas a las necesidades de cada hogar. Sin embargo, con el paso del tiempo o debido a cambios en la decoración, puede surgir la necesidad de renovar su apariencia.

Aquí es donde surge la pregunta: ¿cómo revestir un armario empotrado para darle un aire renovado?

Materiales más usados en el revestimiento

Madera

La madera ha sido el pilar de muchos hogares durante siglos y sigue siendo un favorito por su atemporalidad y versatilidad. Su capacidad para integrarse en una amplia variedad de estilos, desde lo más tradicional hasta lo contemporáneo, la hace destacar. Al optar por la madera para revestir un armario empotrado, se abre un abanico de posibilidades.

Las maderas laminadas son opciones asequibles que pueden ofrecer una estética agradable, mientras que las maderas nobles como el roble o el nogal, aunque pueden requerir una inversión inicial más alta, ofrecen un acabado excepcional y una durabilidad que las justifica. Además, la madera es un excelente aislante térmico, lo que puede ayudar a mantener el contenido del armario en condiciones óptimas.

Melamina

A lo largo de los años, la melamina ha ganado popularidad en la decoración de interiores gracias a su equilibrio entre coste y calidad. Este material, compuesto por láminas de papel impregnadas con resina, proporciona una resistencia notable frente al desgaste diario y la humedad.

Su versatilidad en cuanto a acabados permite imitar texturas, incluida la madera, y ofrece patrones modernos que pueden dar un aire fresco y renovado al espacio. Por ello, es una opción recurrente cuando se busca información sobre cómo revestir un armario empotrado sin gastar una fortuna.

Vinilo autoadhesivo

Los vinilos autoadhesivos han revolucionado el mundo del bricolaje. Son fáciles de aplicar y ofrecen una inmensa variedad de estilos. Desde acabados mates hasta brillantes, pasando por texturas e imitaciones de materiales naturales, los vinilos pueden transformar un armario empotrado en cuestión de horas.

Es una solución perfecta para quienes buscan renovar el aspecto de su armario sin sumergirse en un proyecto complicado o para aquellos que viven en alquiler y necesitan soluciones reversibles.

Antes de revestir un armario empotrado

Preparación

La preparación es la clave para cualquier proyecto de renovación. Una superficie mal preparada puede llevar a resultados insatisfactorios o al desgaste prematuro del revestimiento. Por lo tanto, es esencial dedicar tiempo a limpiar a fondo el armario, eliminando cualquier mancha o residuo.

Si el armario ha sido previamente pintado o barnizado, puede ser necesario lijar para conseguir una superficie más adherente. Una buena limpieza final asegurará que esté libre de polvo y grasa, elementos que pueden interferir con la adherencia de los nuevos materiales.

Elección del material

Esta etapa es crucial porque determinará no solo el aspecto final, sino también la funcionalidad y durabilidad del revestimiento. Hay que tener en cuenta factores como la humedad del ambiente, la frecuencia de uso del armario y el estilo decorativo del entorno.

Es conveniente consultar con profesionales o visitar tiendas especializadas para obtener una visión completa de las opciones disponibles y sus características.

Aplicación

Una vez se ha elegido el material, llega el momento de la aplicación. Aunque algunos materiales como el vinilo autoadhesivo pueden ser fáciles de aplicar por uno mismo, en otros casos, como la madera o la melamina, puede ser beneficioso contar con la ayuda de un experto.

Un profesional no solo garantizará un acabado impecable sino que también puede ofrecer soluciones creativas y técnicas adecuadas para maximizar la durabilidad del revestimiento. Siempre es recomendable seguir al pie de la letra las indicaciones del fabricante para obtener los mejores resultados.

Cómo Revestir un Armario Empotrado: Guía de Bricolaje

Materiales

• Láminas o paneles de revestimiento (pueden ser de madera, melamina, vinilo, entre otros).
• Listones o perfiles de acabado (opcionales, para las esquinas o uniones).
• Pegamento o adhesivo específico para el material que hayas elegido.
• Tornillos (si es necesario, según el método de fijación).
• Bisagras y tiradores (en caso de que quieras cambiar los existentes).
• Lija de grano medio y fino.
• Pintura o barniz (si decides pintar o barnizar el revestimiento).

Herramientas

• Metro o cinta métrica.
• Nivel.
• Lápiz o rotulador.
• Sierra de calar o sierra circular (dependiendo del material y tus preferencias).
• Taladro con brocas adecuadas.
• Espátula o paleta (para el pegamento).
• Brocha o rodillo (si decides pintar o barnizar).
• Destornillador.

Pasos a seguir:

1. Medición y preparación: Mide el armario empotrado en todas sus dimensiones (alto, ancho y profundidad). Ten en cuenta los estantes internos y cualquier otra particularidad del diseño. Decide qué partes del armario quieres revestir (interior, puertas, laterales, etc.).
2. Selección de materiales: Basándote en las medidas y el estilo que buscas, selecciona el material de revestimiento. Puede ser desde paneles de madera hasta vinilos autoadhesivos.
3. Limpieza: Asegúrate de que la superficie del armario esté limpia, seca y libre de polvo o grasa. Si es necesario, puedes lijar ligeramente la superficie para mejorar la adherencia.
4. Corte del material: Con las medidas en mano, marca y corta las láminas o paneles del tamaño necesario. Usa la sierra de calar o circular según el material y tus habilidades.
5. Prueba: Antes de fijar definitivamente, presenta los paneles en su lugar para verificar que todo encaja correctamente.
6. Fijación: Según el material y el método que hayas elegido:
   • Adhesivo: Aplica el pegamento en la parte trasera del panel y colócalo en el lugar deseado. Presiona firmemente y asegúrate de que no haya burbujas de aire.
   • Tornillos: Fija los paneles usando tornillos. Recuerda realizar previamente los agujeros guía para evitar que el material se rompa.
7. Detalles y acabados: Si has elegido listones o perfiles de acabado, colócalos en las esquinas o uniones para un acabado más pulido. Puedes fijarlos con pegamento o tornillos según prefieras.
8. Puertas: Si estás revistiendo las puertas del armario, asegúrate de volver a colocar las bisagras, tiradores o cualquier otro elemento.
9. Acabado final: Si decidiste pintar o barnizar el revestimiento, ahora es el momento. Aplica una o varias capas según las instrucciones del producto y deja secar adecuadamente.
10. Mantenimiento: Una vez completado el revestimiento, limpia regularmente y trata el material según sus necesidades (por ejemplo, la madera puede requerir un barnizado periódico).

Con paciencia y precisión, revestir un armario empotrado puede transformar completamente la apariencia de una habitación, dándole un aspecto renovado y personalizado.

Conclusión

Saber cómo revestir un armario empotrado no solo es una cuestión estética, sino que también puede influir en la durabilidad y funcionalidad del mueble.

Al elegir el material y el método adecuados, se puede garantizar que el armario no solo lucirá renovado, sino que también seguirá siendo un aliado eficiente en el almacenamiento durante muchos años más.