Como reconocer el amianto y evitar problemas para la salud

Si quieres aprender y saber como reconocer el amianto, aquí te daremos toda la información útil para hacerlo bien y así prevenir posibles peligros para la salud

Reconocer el amianto, un material utilizado masivamente en la industria de la construcción hasta finales del siglo XX, es de crucial importancia debido a los riesgos significativos para la salud que representa.

En este artículo, te guiaremos paso a paso en el proceso de identificación del amianto, brindándote información detallada y relevante, sugerencias efectivas, errores comunes a evitar y curiosidades interesantes sobre este controvertido material.

¿Qué es el amianto?

El amianto es un conjunto de minerales fibrosos naturales que se utilizaban ampliamente en la construcción por sus destacadas propiedades de resistencia al fuego, aislamiento térmico y durabilidad.

No obstante, cuando las microscópicas fibras de amianto son inhaladas, pueden causar graves problemas de salud, como la asbestosis, el mesotelioma y otros tipos de cáncer de pulmón, lo que eventualmente llevó a la prohibición de su uso en muchos países.

¿Dónde se encuentra el amianto?

El amianto puede estar presente en una amplia variedad de materiales de construcción, incluyendo pero no limitándose a:

• Aislamiento de tuberías y calderas
• Azulejos y baldosas de vinilo
• Techos de escayola
• Paneles de yeso
• Revestimientos de techos y paredes
• Pinturas y masillas

Además, estos no son los únicos lugares donde se puede encontrar, ya que era una sustancia muy versátil en la industria de la construcción.

¿Cuándo es peligros el amianto?

El amianto es peligroso cuando se perturba y las fibras microscópicas se liberan en el aire donde pueden ser inhaladas o ingeridas. Una vez dentro del cuerpo, estas fibras pueden causar inflamación, cicatrices y, eventualmente, varios problemas de salud graves.

Aquí hay varios escenarios donde el amianto puede ser especialmente peligroso:

Remodelaciones o demoliciones: En edificios que contienen amianto, las actividades de renovación o demolición pueden liberar fibras de amianto al aire. Si los trabajadores o los residentes inhalaran estas fibras, podrían estar en riesgo de enfermedades relacionadas con el amianto.

Materiales degradados: Los materiales que contienen amianto pueden deteriorarse con el tiempo, lo que puede hacer que las fibras de amianto se desprendan y se dispersen en el aire. Es por eso que es crucial inspeccionar regularmente los edificios antiguos en busca de signos de degradación de materiales que podrían contener amianto.

Fuego o desastres naturales: En caso de un incendio, terremoto u otro desastre natural, los materiales que contienen amianto pueden ser dañados o destruidos, liberando fibras de amianto al aire.

Trabajos sin la protección adecuada: Las personas que trabajan con materiales que contienen amianto, como los trabajadores de la construcción, los electricistas y los plomeros, corren un alto riesgo de exposición si no utilizan el equipo de protección personal adecuado.

Las enfermedades relacionadas con la exposición al amianto no aparecen de inmediato. A menudo toma décadas para que los síntomas aparezcan después de la primera exposición al amianto.

Estas enfermedades incluyen mesotelioma (un tipo de cáncer que afecta la capa delgada de tejido que cubre la mayoría de los órganos internos), cáncer de pulmón y asbestosis (una enfermedad pulmonar crónica que causa dificultad para respirar, tos y cicatrices permanentes en los pulmones).

¿Cómo reconocer el amianto?

1: Conocer la fecha de construcción de tu edificio

Los edificios que fueron construidos o renovados antes de la década de 1980 pueden contener amianto. Si tu edificio fue erigido después de este periodo, es menos probable, pero no completamente imposible, que contenga amianto.

2: Identificar los posibles materiales de amianto

El amianto fue utilizado en una extensa gama de materiales de construcción. Si tu casa tiene elementos como aislamiento de tuberías o calderas, azulejos de vinilo, techos de escayola, paneles de yeso o revestimientos de techos y paredes, es posible que estos contengan amianto.

3: Inspeccionar el estado del material

Si el material se encuentra en buen estado, intacto y no es probable que se dañe o desmorone, las fibras de amianto no se liberarán al aire y, por lo tanto, no representarán un riesgo inmediato para la salud.

4: Realizar una prueba de amianto

Si sospechas que un material en tu hogar puede contener amianto, lo más recomendable y seguro es contratar a un profesional para que realice una prueba de amianto. No intentes tomar una muestra por tu cuenta, ya que este proceso podría liberar peligrosas fibras de amianto al aire.

2 errores a evitar

No asumas que el amianto no está presente: Muchos propietarios de viviendas asumen erróneamente que su casa no contiene amianto simplemente porque es relativamente nueva. Sin embargo, el amianto todavía puede estar presente en algunas viviendas construidas en las décadas de 1980 y 1990.

No intentes eliminar el amianto por tu cuenta: Si descubres que hay amianto en tu casa, no intentes eliminarlo por tu cuenta. El amianto es especialmente peligroso cuando se perturba y se liberan fibras al aire. Siempre es mejor contratar a un profesional para eliminar el amianto de manera segura.

Es importante saber reconocerlo

Reconocer la presencia de amianto es una habilidad esencial, especialmente para aquellos que viven o trabajan en edificios más antiguos. Aunque su uso ha disminuido significativamente, todavía puede estar presente en una gran cantidad de materiales de construcción.

El amianto es un peligro para la salud solo cuando las fibras se liberan al aire y se inhalan, por lo que es crucial manejar cualquier sospecha de amianto con el máximo cuidado.

Recuerda, si sospechas que un material puede contener amianto, siempre es más seguro buscar el asesoramiento de un profesional. Asegúrate de no perturbar el material sospechoso y evita intentar la eliminación del amianto por tu cuenta.

Con la información detallada y las recomendaciones proporcionadas en este artículo, estarás mejor equipado para identificar y manejar de manera segura cualquier posible presencia de amianto en tu entorno.