Cómo purgar radiadores: consejos para ahorrar en calefacción

Aprende a purgar radiadores eficientemente para optimizar la calefacción, reducir ruidos y ahorrar energía. Guía paso a paso con consejos prácticos.

Purgar los radiadores es una tarea esencial para garantizar su correcto funcionamiento y la eficiencia de nuestro sistema de calefacción.

Si notas que tu radiador no calienta de manera uniforme o si escuchas ruidos extraños provenientes de él, puede ser el momento de purgar. A continuación, te explicamos paso a paso cómo realizar esta tarea de forma sencilla y efectiva.

Qué significa purgar un radiador

Purgar un radiador se refiere al proceso de eliminar el aire acumulado en su interior. A medida que el sistema de calefacción funciona, es posible que el aire quede atrapado en los radiadores, creando bolsas de aire.

Estas bolsas pueden interferir con la circulación adecuada del agua caliente, lo que reduce la eficiencia del sistema. Al purgar un radiador, se abre una válvula específica para permitir que este aire escape, mejorando así el rendimiento y la eficiencia del radiador.

¿Por qué es necesario purgar los radiadores?

Acumulación de aire

Los radiadores pueden tener aire en su interior, lo cual impide que el agua caliente fluya de manera adecuada. Este fenómeno puede tener múltiples causas. Durante el proceso de llenado, es posible que se introduzca aire al sistema.

Además, pequeñas fugas o la reparación de algún componente pueden permitir la entrada de aire. Esta acumulación no solo afecta el rendimiento, sino que puede generar ruidos molestos, como golpeteos o burbujeo, en el radiador.

Eficiencia energética

La presencia de aire en un radiador interfiere con su capacidad para transmitir calor de manera efectiva. En zonas donde hay aire, el radiador se sentirá más frío al tacto, lo que lleva a que el sistema de calefacción tenga que trabajar más para alcanzar la temperatura deseada.

Esto puede resultar en un mayor consumo de energía y, por ende, en un aumento en la factura de calefacción. Al purgar regularmente los radiadores, nos aseguramos de que el sistema opere con la máxima eficiencia energética.

Como purgar un radiador en 6 pasos

1. Prepara las herramientas necesarias Antes de comenzar, es fundamental tener a mano las herramientas adecuadas. Asegúrate de tener un destornillador plano o de estrella, dependiendo de la válvula de tu radiador. La llave de purga es específica para este trabajo y es esencial para abrir la válvula sin dañarla. Finalmente, tener un recipiente o paño es vital para evitar ensuciar el área con agua que pueda derramarse durante el proceso.

2. Apaga la calefacción Para evitar quemaduras o accidentes, es crucial que los radiadores estén fríos al tacto. Apaga el sistema de calefacción y dale tiempo suficiente para que los radiadores se enfríen completamente.

3. Ubica la válvula de purga Generalmente, la válvula de purga se encuentra en la parte superior de los radiadores, ya que es donde el aire tiende a acumularse. Es una pequeña válvula que suele tener una forma que permite ser abierta con una llave especial o un destornillador.

4. Purga el aire Con precaución, coloca el recipiente o paño debajo de la válvula. Utiliza la llave de purga o el destornillador para abrir lentamente la válvula. Notarás un sonido de silbido mientras el aire escapa; cuando este sonido cese y comience a salir agua de forma constante, es momento de cerrar la válvula.

5. Repite el proceso con todos los radiadores Para garantizar que todo el sistema esté libre de aire, es esencial purgar todos los radiadores de la casa. Es aconsejable empezar por los radiadores de la planta baja y avanzar hacia los pisos superiores, ya que el aire tiende a subir.

6. Enciende la calefacción Después de haber purgado todos los radiadores, enciende el sistema de calefacción y verifica que todos los radiadores calienten de manera uniforme. Si notas que alguno sigue frío o emite ruidos, es posible que debas repasar el proceso o verificar si hay otros problemas en el sistema.

¿Cada cuánto tiempo hay que purgar los radiadores?

Para mantener un sistema de calefacción eficiente, es recomendable purgar los radiadores al inicio de cada temporada de calefacción. Esto garantiza que estén listos para funcionar al máximo de su capacidad cuando más los necesites.

Revisión del sistema

Si, después de purgar los radiadores, persisten los problemas de calefacción o notas fugas, es posible que haya un problema más profundo en el sistema. En tal caso, lo mejor es contactar a un profesional de la calefacción para que realice una revisión detallada y proponga soluciones adecuadas.

Conclusión

Purgar los radiadores es una tarea sencilla pero esencial para garantizar la eficiencia y el correcto funcionamiento de nuestro sistema de calefacción.

Siguiendo los pasos mencionados y siendo constantes en su mantenimiento, prolongaremos la vida útil de nuestros radiadores y aseguraremos un calor uniforme en nuestro hogar. ¡No olvides hacerlo regularmente!