Como curar el crujido de mandíbula y remedios para solucionar el problema

El crujido de mandíbula, técnicamente conocido como trastorno de la articulación temporomandibular (ATM), puede ser un problema incómodo y a veces doloroso.

Aunque puede ser preocupante, hay muchas formas efectivas de manejar y aliviar este problema. Este artículo discutirá las causas y síntomas del crujido de mandíbula, además de varias formas de tratarlo y prevenirlo.

Causas del crujido de mandíbula

Maloclusión dental

Una de las causas más comunes del crujido de mandíbula es una mala alineación de los dientes, también conocida como maloclusión.

Cuando los dientes superiores e inferiores no encajan correctamente, puede generar un desequilibrio que causa tensión en la mandíbula.

Esta tensión puede manifestarse en una serie de síntomas, entre los que se incluye el crujido o chasquido audible al abrir o cerrar la boca.

La maloclusión puede ser el resultado de factores genéticos, desarrollo dental irregular durante la infancia, o incluso hábitos perjudiciales como chuparse el pulgar. En algunos casos, la maloclusión puede corregirse mediante ortodoncia u otros tratamientos dentales.

Trastornos de la articulación temporomandibular (ATM)

Los trastornos de la ATM son otra causa común del crujido de mandíbula. La articulación temporomandibular es la que conecta la mandíbula con el cráneo, permitiendo la apertura, cierre y movimientos laterales de la boca.

Este crujido puede ser el resultado de varios problemas con la ATM, que pueden incluir lesiones en la mandíbula o la cabeza, artritis en la articulación, bruxismo (rechinar y apretar los dientes), y ciertos problemas genéticos o reumatológicos.

Estos problemas pueden resultar en una disfunción de la ATM, provocando crujidos, chasquidos o incluso dolor al mover la mandíbula.

Síntomas del crujido de mandíbula

Sonido de crujido o chasquido

Uno de los indicadores más comunes de un problema con la ATM es el sonido de crujido o chasquido al abrir o cerrar la boca.

Este sonido puede ser más notorio cuando se come, se bosteza, o se mueve la mandíbula de cierta manera.

No siempre es doloroso, pero puede ser molesto y alarmante. Además, el crujido o chasquido puede ser acompañado por una sensación de bloqueo o dificultad para abrir completamente la boca.

Dolor y molestias

Además del crujido, los trastornos de la ATM pueden presentarse con dolor en varias áreas. Este dolor puede localizarse en la mandíbula, la cara, el cuello, o incluso en la cabeza.

Puede ser un dolor agudo y punzante, un dolor sordo y constante, o incluso una sensación de tensión o presión. Este dolor puede intensificarse al comer, bostezar, hablar durante largos períodos de tiempo, o mover la mandíbula de ciertas maneras.

En algunos casos, el dolor puede extenderse a los oídos, causando sensaciones de taponamiento o zumbido.

Cómo curar el crujido de mandíbula

Ejercicios para la mandíbula

Los ejercicios de fortalecimiento y estiramiento para la mandíbula pueden ser una herramienta valiosa para reducir el crujido y otros síntomas asociados con los trastornos de la ATM.

Estos ejercicios pueden ayudar a mejorar la movilidad de la mandíbula, a aliviar la tensión muscular y a promover una mejor alineación de la articulación.

Estiramiento de la mandíbula

Los ejercicios de estiramiento de la mandíbula pueden ayudar a reducir la tensión en la mandíbula, lo que puede aliviar algunos de los síntomas de los trastornos de la ATM.

Estos ejercicios pueden incluir abrir y cerrar la boca lentamente, mover la mandíbula de un lado a otro, y realizar movimientos circulares con la mandíbula.

Fortalecimiento de la mandíbula

Los ejercicios de fortalecimiento pueden ayudar a fortalecer los músculos que rodean la articulación temporomandibular, lo que puede mejorar la función de la articulación y reducir los síntomas de los trastornos de la ATM.

Estos ejercicios pueden incluir apretar y soltar la mandíbula, mover la mandíbula de un lado a otro contra resistencia, y realizar ejercicios de masticación controlada.

Terapia física

La terapia física puede ser un tratamiento muy útil para el crujido de mandíbula y otros síntomas de los trastornos de la ATM.

Un fisioterapeuta puede proporcionar tratamientos especializados, como terapia manual, ultrasonido terapéutico, o electroterapia, además de enseñar ejercicios específicos para mejorar la función de la articulación.

La terapia física puede mejorar la movilidad de la mandíbula, reducir el dolor y la inflamación, y promover una mejor alineación y funcionamiento de la articulación temporomandibular.

Férulas oclusales

Las férulas oclusales, también conocidas como guardas bucales, son dispositivos que se usan en la boca para tratar problemas de la ATM. Estas férulas pueden ser diseñadas a medida para cada paciente y se utilizan principalmente durante la noche.

Funcionan proporcionando una barrera entre los dientes superiores e inferiores, lo que puede ayudar a prevenir el rechinar y apretar de los dientes, reducir la tensión en la mandíbula, y permitir que los músculos y las articulaciones de la mandíbula se relajen y se curen.

En algunos casos, también pueden ayudar a reajustar la mandíbula a una posición más neutral, aliviando así el crujido y el dolor.

Crujido de mandíbula, un problema común

El crujido de mandíbula puede ser un problema desagradable, pero afortunadamente existen diversas maneras efectivas de tratarlo y prevenirlo.

Con una comprensión clara de las causas y síntomas del crujido de la mandíbula, es más fácil encontrar el tratamiento adecuado y alcanzar un alivio duradero.

Siempre consulte a un profesional de la salud para recibir un diagnóstico y tratamiento adecuados.